Salud de la piel: La piel de un individuo puede revelar historias sobre su vida. Desde el brillo del embarazo hasta las manchas que salen a la superficie por el daño solar. Las personas escuchan acerca de cómo proteger su piel de los rayos del sol, pero existen muchos movimientos simples de salud que pueden mantener la piel en excelente forma. La piel proporciona una barrera física y química entre el ambiente exterior y los tejidos interiores. Esta barrera funciona para proteger los tejidos subyacentes de patógenos, productos químicos y exposiciones ambientales. Estructuralmente, la piel se compone de dos capas principales, la epidermis y la dermis. La epidermis o capa superior es la responsable de las funciones de barrera de la piel. La dermis es el soporte estructural y nutritivo debajo de la epidermis. Cada capa tiene su propia estructura y función únicas y cada una tiene sus propios requisitos. Varios desafíos para una piel saludable incluyen:
Fotodaño o exposición a luz ultravioleta (UV). Las quemaduras solares son la forma más común.
Piel seca
Arrugas
Curando heridas
Aging
El estado nutricional juega un papel importante en el mantenimiento de una piel sana. La nutrición de la piel se puede mejorar directamente a través de aplicaciones tópicas. La aplicación tópica de micronutrientes puede complementar el consumo dietético, lo que lleva a una barrera protectora más fuerte y saludable del cuerpo. La salud de la piel puede incluso ayudar a prevenir la inflamación dañina que se ha asociado con problemas de dolor crónico como el dolor del nervio ciático o la ciática, el dolor de espalda e incluso la fibromialgia.